Milenios que persisten en vivir
Por Jorge Alanis Zamorano
Allá en Ticul, con nuestro amigo Luis Miguel Segura Esquivel, quien lleva a cabo una actividad que si bien es conocida en todo el mundo, se resiste a perderse pese a que encontramos infinidad de productos con diversos materiales. Es aquí donde definen con orgullo cada pieza que se expondrá para su venta. El barro es el elemento con el que logran plasmar una parte importante de nuestra identidad. Desde macetas hasta piezas mayas como los aluxes, por mencionarte un par de ejemplos.
Al estar con ellos me tocó ver cómo los extranjeros llegan para comprar emocionados sin poner resistencia a lo que ven, a lo que se les muestra. Me dice Luis Miguel que muchos de ellos viven aquí en la Península y adornan sus casas con innumerables piezas de barro pues tienen un especial gusto por este tipo de artesanía y estilo, incluso dijo, que lo respetan mucho.
Aprendió el oficio
de su padre y lo mantiene muy vivo. Una tienda donde además se detalla cada pieza y un taller ubicado en otro lugar donde le dan forma al barro con moldes o de la manera tradicional “a mano”. Es interesante ver y entrar a un mundo que pareciera conocido, pero sólo vemos lo último, las piezas terminadas y cuando entras a las entrañas de un taller como éste, te quedas con un aprendizaje más completo y sobre todo reconociendo a nuestra gente. Que las imágenes hablen por sí solas y especialmente no dejemos de adquirir y tener en nuestros hogares el origen de nosotros, nuestra identidad.
