Conkal y Mérida, prácticamente no hay separación entre ambos municipios, el crecimiento de la mancha urbana casi los unió sin notarlo. Hoy en Conkal existen y están construyendo una gran cantidad de fraccionamientos y aún hay por hacerse muchos más.
Juan Cruz y Ninfa Lizama, vecinos de Conkal, preocupados por los espacios verdes, tienen la idea de reforestar, hacer el “Paseo Verde Conkal”, sin embargo, para el 2018, el municipio tiene planeado una avenida de salida hacia la carretera a Mérida y que afectará esa nueva área verde que ellos piden y necesitan. Solicitan que las autoridades consideren otras opciones alternas en la entrada y salida del municipio.
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Con esa inquietud se juntaron con varios vecinos (ya son 25) con la idea de hacer conciencia de la importancia de preservar las zonas verdes y reforestar. No se niegan al desarrollo, pero tratan de evitar que las áreas arboladas desaparezcan del todo y combatir el cambio climático que está ocasionando el crecimiento arbitrario y rápido de la plancha de concreto.
Piden que ese Paseo Verde, no sólo se reforeste, también crear espacios alternativos, por ejemplo:
• Hacer pequeños viveros de plantas tradicionales, medicinales, hortalizas y dar talleres sobre esos temas, así como también sobre el reciclaje, cuidado del ambiente y otros más.
• Crear una pequeña biblioteca comunitaria con espacios para sentarse a leer.
• Realizar exposiciones, conciertos con la Sinfónica de Niños de Conkal, convivencias familiares y un sinfín de actividades.
¿Por qué no antes?
Pretextos siempre hay. Cuando Juan Cruz decide hacer un comentario en Facebook sobre la situación, una persona le respondió: es que nadie hace nada. La respuesta interna de Juan fue: ¿Cómo que no? Y es cuando decide convocar a la primera reunión donde no llegaron más que 3 personas, y fue así hasta la cuarta reunión cuando llegaron 10 vecinos más. Así poco a poco van sumando gente, empujándola, que hagan algo por la comunidad pero sobre todo para ellos mismos. Actualmente la Asociación Kanan Kab y Seduma son los posibles donadores de árboles. Ellos ya hicieron la convocatoria para que todo el municipio se sume.
Aunque sabemos que son muchísimas las razones por las que la urbanización continuará “comiéndose” el suelo rural, que no sea en un solo lugar, que la gente se vaya sumando en cada municipio, comisaría, colonia, en las casas, que nos contagiemos de esta conciencia, porque es ilusorio y ridículo pensar que con reforestar o proteger unas cuantas áreas verdes vamos a lograr crear resiliencia en el efecto invernadero. (Ver Revista Yucatán #328).
