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Amenaza para la pesca yucateca

El presidente de la Unión de Armadores de Yucatán, Manuel Sánchez González, alertó contra las consecuencias de no ponerle un freno a la pesca furtiva de especies marinas como el pulpo, el caracol, la langosta y el pepino de mar.

 

En toda la costa yucateca podría surgir un problema social cuando en agosto se inicie la temporada pulpera y no haya suficiente molusco a causa de la depredación que hacen los furtivos.

 

Las lanchas ribereñas y los barcos de la flota mayor quedarían inactivos ante la falta de pulpo en las aguas yucatecas y los que sufrirán las consecuencias serán los pescadores y sus familias, manifestó el entrevistado.

 

El líder de los armadores pesqueros señaló que en días pasados estuvo en Las Coloradas, donde los pescadores le informaron que foráneos que llegaron desde el año pasado se dedican a la pesca furtiva de pulpo, langosta y pepino de mar.

 

De acuerdo con los informes que le proporcionaron a Manuel Sánchez, la pesca furtiva de pulpo por medio del sistema de buceo y gancho (arte prohibida para la pesca) se realiza por las noches y de esa manera los depredadores evitan que en caso de que haya inspecciones en el día los detecten.

 

El dirigente de los armadores señaló que se está a tiempo para que las autoridades actúen y frenen la pesca furtiva.

 

Si las dependencias correspondientes no hacen nada para solucionar el furtivismo, la situación se complicará cuando oficialmente se inicien las temporadas de captura y no haya producto, entonces la economía pesquera se verá seriamente afectada y habrá un grave problema social, insistió

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