Molestos por la pesca furtiva durante la contingencia del Covid-19, que pone en riesgo de contagios, habitantes expulsaron a pescadores foráneos y cerraron el puerto de abrigo desde anoche.
Habitantes detuvieron a buzos de Champotón, Campeche, y Dzidzantún, Yucatán, que ingresaron al puerto para pescar ilegalmente.
Los fuereños ingresaron por tierra y mar en complicidad de dos personas, según trascendió, que ya son buscadas para detenerlas.
Entre los 7 detenidos, 5 son originarios de Champotón y 2 de Dzidzantún, uno de ellos identificado como Álvaro Flores, principal comprador de pulpo ilegal en la zona de la costa.
Riesgo para los habitantes
Los pobladores y pescadores acudieron a lo que antes funcionaba como la disco el “Faro”, pues se dijo que ahí había más personas de Campeche, que ya empezaron a «inundar el puerto» poniendo en riesgo a la gente ante la contingencia.
El ambiente en Dzilam de Bravo es de tensión, ya que los habitantes advirtieron que no dejarán pasar a ningún buzo de otro municipio.
Desde las primeras horas de hoy los pescadores, de común acuerdo con las autoridades municipales, bloquearon la salida del puerto de abrigo para que nadie salga a pescar.
Bloqueado con un barco
Asì, el acuerdo que se había tomado para ayudar a la gente de Dzilam de Bravo y Dzilam González para que salieran a pescar dos ó tres días en la semana se echó para atrás con la llegada de los fuereños.
El puerto de abrigo permanece bloqueado con un barco y se liberará hasta que buzos de otros lados sean retirados de Dzilam de Bravo.
Fuente: Diario de Yucatán
