Propósitos de vida para sus estudiantes
Por Jorge Alanis Zamorano
Se trata facilitar el camino a nuestras verdaderas semillas del futuro, jóvenes que terminan sus estudios pero con experiencia en campo. No es otra cosa más que querer apoyar, tan simple como tener la visión a futuro para ellos, cerrar filas y encontrarse únicamente para pactar el trabajo de experiencia de jóvenes que pronto terminarán sus estudios.
Inicios.
El Ing. Mario Ben-Hur Chuc Armendáriz, coordinador de la carrera de Ingeniería en Innovación Agrícola Sustentable relata que en 2017 contactan al Ing. Fernando Poblano, administrador de Flores Finas de Teya para la realización de un proyecto de flores de Nochebuena en el Tecnológico de Superior de Calkiní (ITESCAM). Entre 2018 y 2019 inician un proyecto piloto incorporando actividades de éxito que se realizan en la Universidad EARTH de Costa Rica que le da prioridad a la experiencia en campo; de ahí nacen nuevos modelos duales donde agregan a jóvenes con los mejores proyectos y rendimientos académicos con la empresa Flores Fina de Teya.
La inquietud de los jóvenes.
El Ing. Fernando Poblano menciona que el proyecto nace cuando los jóvenes, al terminar sus estudios en Innovación Agrícola no encuentran un campo de acción, optan por el autoempleo buscando nichos donde puedan aplicarse. Observan que la Universidad EARTH cuando terminan la carrera cuentan con un programa asociativo con los egresados, pero más con los padres ya que además de pagar la carrera de sus hijos invierten en el proyecto donde al final pueden dividirse los resultados, trabajar con la universidad o bien, venderle todo el “know how” (el conocimiento). Al ver esto, aquí, se pacta que jóvenes del octavo semestre trabajen entre año y medio o dos años para que cuando terminen salgan con un proyecto asociativo tal como se realiza en Costa Rica con la Universidad, sólo que en este caso es con la empresa, misma que incluso invertiría con ellos allá en Campeche siendo lo más novedoso del proyecto.
El desarrollo
Por su parte, el Lic. José Evia Choza, jefe de Vinculación, comenta que con este tipo de educación dual donde realizan residencia profesional aunadas a las clases, incorporan lo aprendido e incrementan en acción en el campo. Es prácticamente un año de capacitación y terminan la carrera con un producto final que será su tesis de titulación, pero además un producto que emana de una carrera que resulta como proyecto integral de cada uno de los alumnos que participan. Finalmente es un proyecto de vida que crecerá y los hará valer como empresarios. En este caso, son cuatro jóvenes de la carrera de Ingeniería en Innovación Agrícola Sustentable del Instituto Tecnológico Superior de Calkiní. Los alumnos son Luis Angel Aké Puc, José Carlos Yan Cahuich, Luis Donaldo Perera Carrillo, Fátima Rebeca Balam Cabum, todos ellos del noveno semestre.
