Entre panaderos y urdidoras
Por Renate Dabrowski
Panadería “El Rey” en Tixkokob, Yucatán
En el mero centro de Tixkokob se encuentra la conocida panadería “El Rey” fundada en el año de 1924 por el señor Obdulio Araujo Sabido y cuyo dueño actual es su nieto Víctor Manuel Araujo. Al entrar a la panadería se siente el rico olor de los panes frescos y el dulce aroma de las galletas que te invitan a probarlas.
La casa en donde está establecida la panadería tiene más de 200 años y mantiene una fachada sin rastro de modernidad que a la vez contrasta con la maquinaria, antigua, pero que aún funciona. “El Rey” cuenta con una amplia red de cobertura, ya que sus clientes no solamente son de Yucatán, sino también de Campeche, Tabasco y otras partes. Cada dos o tres semanas llega un comprador de Ciudad del Carmen y se lleva 500 paquetes de galletas.
El negocio cuenta con cinco empleados, que además de elaborar deliciosas galletas venden todos los días alrededor de 800 panes.
La panadería es muy conocida ya que muchos famosos y personas importantes la han visitado entre los que se encuentran artistas como Armando Manzanero y hasta Pedro Infante.
Hamacas de Tixkokob, Yucatán
Esfuerzo mal compensado
Juana del Socorro Silveira, de 64 años de edad, se dedica a urdir hamacas desde hace más de 30 años, trabajo, el cual dice, es muy duro y en donde gana muy poco, razón por la cual tiene que laborar en una fábrica cerca de donde vive. Doña Juana nos contó que gasta cuatro rollos de hilo en urdir una hamaca, la cual termina en dos días y gana $40 pesos por cada hamaca.
Adriana Medeleine Chalé Canché, de 17 años, es una joven que también se dedica al urdido de hamacas. Ella nos relató que le toma tres días terminar una, y también gana $40 pesos por hamaca y el dinero que gana lo utiliza para ayudar a su familia.
