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Una gota de miel

La curiosidad le dio el sueño americano

Es común enterarse sobre historias de familias que se desintegran por falta de expectativas. Las parejas se separan y ellos, los varones, van en busca de dinero y oportunidades para lograr los ingresos que no ven ni remotamente en su tierra natal. Encontramos muchos finales donde nunca más vuelven, no se sabe más de ellos, rehacen sus vidas con otra pareja y otros mandan dinero logrando fincar sus casas en México y regresar con algo que juntaron para comenzar algún negocio quizás aquí en su país pero, al final, la historia se repite.
miel  (2) La señora Carmen Notario López ahora productora de miel, nos cuenta su historia, su sueño mexicano hecho realidad. Su esposo viajó a Estados Unidos para trabajar arriesgando incluso la vida, ella y su hija por su parte de igual manera corrieron el mismo riesgo; quedarse en casa. Hoy la vida les da la razón, doña Carmen -49 años-, ya otorga trabajo incluso a los más jóvenes de su comunidad, -claro que sólo si estudian, si quieren ser algo en su futuro-también incluye a las mujeres y personas de la tercera edad. Desde el Ejido Nuevo Pital allá en Carmen, Campeche nos encontramos con esta historia de éxito. Ella rompió el mito de “La curiosidad hizo mato al gato” veamos por qué.

¿Cómo inicia su proyecto?
Cuando comencé la apicultura lo hice antes que mi esposo. Un día pensé: “Tengo que hacer algo”. Todo comenzó como un juego, como un sueño… mera curiosidad. Me decían que la apicultura es buena y comencé a leer libros. Mucha gente te dice, te alienta pero no dicen cómo hacerlo o te dan cierta información. Las ventajas las dicen pero no las desventajas. Investigué para meterme bien al negocio. Compré mis primeras abejas y le dije a mi esposo “sabes qué, la apicultura si nos deja”. Y mi esposo sabe que si me meto a hacer algo es porque es bueno, y me expresó: “Voy a estar contigo, te apoyo”; él estaba en el norte, en Estados Unidos trabajando. Después de dos años de comenzar con las abejas le hablé diciéndole: “¡Vente!, ¡Regrésate porque necesito tu ayuda, esto es un buen negocio para nosotros!”. Mi esposo regresó a casa y comencé a enseñarle el manejo de las abejas. También solicité apoyo al gobierno y así fui creciendo, poco a poco. Ahora, en época de cosechas ocho personas nos apoyan, en tiempos de mantenimiento únicamente dos personas y aparte nosotros estamos allá trabajando en el apiario. Muchas familias tienen sus terrenos y los venden o siembran pasto para el ganado pero si le meten a la apicultura les deja dinero.

¿Su hija estudia?
Sí, estudia la licenciatura en Derecho y la miel está pagando sus estudios.

¿No solicita más personas para apoyarle?
Los jóvenes van conmigo cuando no tienen clases, pero si se brincaron las clases yo no les doy trabajo porque lo único que quiero es que ellos salgan adelante en sus estudios. Incluso en vacaciones les doy trabajo, a las mujeres y personas de la tercera edad nos apoyan también.

Con esa hambre de éxito que usted demuestra ¿Cómo se ve el día de mañana?
Me veo como una gran empresaria, exportando mi miel, con su marca. Las cosas se hacen dos veces: cuando las planeas y cuando las ejecutas. ¡Por cierto! ya me entregaron mi código de barras y con eso puedo trabajar mejor todavía. Estoy muy feliz por todo lo que me está pasando.

¿Qué mensaje da a las personas que piensan hacer algo y no se deciden?
Que se acerquen a la gente que sepa de apicultura, no se van arrepentir, que no tengan miedo. Sí, al principio da miedo porque es algo que no hemos hecho. Para tener cosas mejores hay que hacer cosas que nunca has hecho. No había pensado en abejas, en marca propia y ya lo tengo. ¡A Campeche le va ir mejor porque esta cuerda no se rompe!

¿Si alguien quiere hacer negocio con usted?
Sí, mi teléfono celular es 982 11 04 666, correo: carmen_notario_lopez@hotmail.com y con gusto hacemos negocio.

Por Jorge Alanis Zamorano

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