Especial Rural MX
Actualmente a nivel global, la industria del camarón está dejando más ganancias que el salmón. ¿Los motivos? Se trata de una de las especies con mayor manejabilidad dentro de las granjas, gracias a factores como su capacidad de adaptación en altas densidades, su resistencia a las temperaturas extremas y su margen de ganancia.
Para profundizar en el tema, platicamos con el Biólogo Daniel Peñalosa, especialista en el análisis bioeconómico de la producción de camarón, quien tiene una maestría en Producción Acuícola y un doctorado en Ciencias en Bioeconomía Pesquera y Acuícola; él ha trabajado con granjas y laboratorios de camarón durante más de cuatro años, asesorando a todas aquellas empresas que buscan tecnologías para maximizar o mejorar la producción y el rendimiento sostenible.
¿Cuánto se necesita invertir para arrancar con una granja de camarón?
En la producción de camarón no hay un monto específico, siempre depende de los objetivos y del capital que se tenga disponible; he visto proyectos que comienzan con menos de 400 mil pesos y otros que rebasan los 150 millones. Por ejemplo, para algo más local, una tina de 10 metros de diámetro necesita aproximadamente 8 mil pesos de geomembrana, además de los sistemas de aireación, tipos de filtrados, mano de obra y otros gastos. Entonces, tiene variantes.
¿Cuál es el área que se requiere para la producción?
Si se busca ser rentable, yo diría que al menos una hectárea, aunque como te mencionaba, depende también de tus objetivos. Afortunadamente, hoy la producción de camarón se hace con densidades más altas y requieren menos área, entonces, se puede producir de forma intensiva en espacios de a partir de 500 metros cuadrados.
En cuanto al factor de conversiones, ¿es rentable la alimentación del camarón?
Bueno, para los que no lo conozcan, este dato se refiere a la cantidad de alimento que tengo que darle al animal para conseguir biomasa a cambio. El factor de conversión del camarón es muy bueno, muy parecido al del salmón, e incluso si el manejo es correcto, puede llegar a ser espectacular y darnos un alto margen de ganancias.
¿Cuánto se puede llegar a producir?
Esto depende, porque en la acuacultura hay muchos tipos de producción, desde la extensiva, la intensiva, la producción con métodos de biofluc, con sistemas abiertos, hay tanques de tierra, de plástico, de fibra, ¡en fin!, es una pregunta un poco abierta por todos estos factores; pero por ejemplo, si tienes un espacio de 6 hectáreas puedes producir alrededor de 5 toneladas a la semana, siempre y cuando manejes bien la producción y tengas un personal correctamente capacitado.
¿Cómo ves a Yucatán respecto a esto?
El estado de Yucatán es una muy buena zona para la producción de camarón, empezando por su clima, que permite que podamos tener tres o hasta cuatro ciclos productivos al año, a diferencia de otras partes del país. Otra ventaja es la cantidad abundante de agua que hay, no solamente en la costa, sino al interior, lo que permite obtener agua de pozo de forma más económica y con grandes rendimientos. En ese sentido, la península es ideal para la producción de camarón; de hecho, se me hace un poco extraño que la fuerza productiva se encuentre en el norte de México cuando es en el sur donde tenemos muchísimo potencial.
Y es que quizás aún no se produce mucho camarón en granjas, pero sin duda, la actividad acuícola está a la alza en la entidad…
¡Así es! Hay que tener en cuenta que en Yucatán ya se produce bastante tilapia, y la acuacultura tiene sus generalidades, sin importar la especie con la que se trabaje; entonces, la gente que ya tiene experiencia con la tilapia puede reconvertirse al camarón con muy poca capacitación adicional. Además, la oferta educativa de la Universidad Autónoma de Yucatán, la Universidad Marista, la Universidad Anáhuac y la Universidad Chapingo abarca este sector dentro de sus planes, que es sumamente importante no solo para la producción, sino para la administración. Creo que hay un panorama positivo para los próximos cuatro o cinco años.
Entonces en pocas palabras: el camarón es negocio…
Sin duda alguna. Hoy por hoy, el camarón mueve más dinero que el salmón y el que producimos en México genera más de cuatro millones de toneladas de producción acuícola a lo largo del mundo. Es una de las especies más rentables por los ciclos de producción, por el factor de conversión alimenticia, además de que es un animal muy noble, de fácil manejo, resistente y que se adapta a las altas densidades. El único riesgo sería el control de enfermedades, pero teniendo un correcto protocolo de bioseguridad y monitoreo no hay de qué preocuparse… el camarón es buena apuesta de negocio si lo sabes administrar.