Una mujer con buena vibra
Le podríamos llamar vitalidad, que ilumina a las personas -aunque no lo creas- te atrae, allí estaba esa fuente de energía, la señora María del Socorro del Carmen Marín Canul vive en la comisaría Sudzal Chico, Tekax, Yucatán. Ella hace palanquetas de cacahuate y pepita, dulces de camote y papaya. Nos cuenta que la manera de hacerla es casera, el proceso es en tres días y tres noches de cocción en leña; agrega agua, azúcar, canela y vainilla. Le gusta ir a eventos como la feria de Xmatkuil porque vende bien. Doña María del Socorro y su esposo intervienen en la elaboración, pero no dependen únicamente de esta actividad, también trabajan el campo, siembran chile habanero, max, dulce, ancho, guajillo, así como azucenas, soya, calabaza, maíz, productos que venden en su comisaría y en Tekax. “Vivo en un ranchito -agrega sonriente- también tengo pavos, gallinas, cochinos, perro, gatos ¡todo lo que tiene un ranchito, me encanta estar ahí!” Cuando le pregunté que si la vida en el campo es diferente aseguró firmemente que es muy económica además de apacible: “Tengo todo lo que quiera comer y es saludable, hay tranquilidad, no escuchas los problemas, es agradable vivir ahí”. Tiene cinco hijos; cuatro varones y una muchacha. Orgullosa me afirmó “…y aunque casados ayudan en las labores del campo, les gusta…”.
El más grande de sus nietos dice de ella: “Abuelita borda, cocina, prepara pasteles, dulce… hace de todo, nada más robar no aprendió” suelta una gran sonrisa y termina comentando que siempre le aconseja “Hijo no vayas agarrar ni un cinco porque estás robando, ponte a trabajar”.
El mensaje que nos deja la señora María del Socorro para quienes ya no quieren trabajar en el campo es: “El trabajo es vida, salud, dinero. Si no trabajas y te dedicas a cosas malas, por ejemplo, a robar, a quitarle a otra persona humilde, no haces el bien. Trabaja, ocúpate a producir algo para ti mismo, para tener una vida saludable”.
Por Jorge Alanis Zamorano
