Por Jorge Alanis Zamorano
A la entrada de Motul, llegando por Mérida, se encuentra el Parque Industrial, ahora acompañado con un gran nombre en la entrada: “Sisal Tejidos Yucatán”, o por sus siglas “STY”. Corresponde con letras pequeñas a lo más lógico “Biofibras para el futuro”, con un argumento basado en la historia de Yucatán, y en respuesta a nuestros días, y a las necesidades económicas y laborales que en el Estado se buscan. La fibra natural y biodegradable es una respuesta a las contaminantes fibras plásticas.
Con la presencia de personajes representativos en el sector agropecuario y político, sin dejar atrás a la fuerza laboral que dará parte al sustento de la planta, el ingeniero Fernando Ponce García, presidente de la empresa STY, se muestra en la inauguración con un fuerte mensaje que entre líneas, dejó ver la preocupación por recuperar no solo la historia en su continuidad, sino también de recuperar la posición que se tuvo en años de bonanza henequenera: “No vamos a resignarnos a que el henequén se le vincule a la melancolía o romanticismo de tiempos pasados (…) ¡Ya basta de resignarnos a importar la fibra de henequén de esos lugares donde sí le tuvieron fe!”.
Reconquistar parte de los suelos con henequén, demuestra un gran esfuerzo que en el dictado del ingeniero Fernando Ponce pronuncia por cerrar la cadena de producción, sumando a todo aquel que quiera integrarse en dicha recuperación y ganancias económicas; y con precisión, reconoce la posición de los productores en su gran esfuerzo por sembrar los vástagos y la espera de 5 años para que finalmente logren el corte de las hojas.
El ingeniero Ponce lanza un llamado al gobernador Mauricio Vila Dosal para lograr el apoyo a productores quienes pueden sembrar, sin embargo, requieren de impulso para retomar el cultivo del oro verde considerando reactivar el programa de nueva siembra, o al menos, lograr financiamientos con tasas de un solo dígito, acompañado del compromiso de Sisal Tejidos Yucatán por comprar a precios redituables para los productores superiores al mercado, con el único requisito de que el producto sea de calidad.
Otro llamado al gobierno federal
Con la presencia en la inauguración del licenciado Adán Augusto López Hernández, Secretario de Gobernación, el ingeniero Fernando Ponce celebra que la Federación apoye a los productores a través de “Sembrando Vida”, no obstante, se requiere promover cultivos de la región como el henequén, los cuales no requieren inversión en sistemas de riego, por lo que de hacerlo, se fortalecerá la vocación agrícola regional.
Por su parte, el licenciado Adán Augusto López Hernández nombró durante su intervención al “súper delegado” Joaquín Díaz Mena, -quien estuvo presente-, mencionando: “No sé cómo le vamos a hacer, pero entre el delegado, ‘El Guacho’, y un servidor, vamos a convencer al presidente de la República para que en su próxima visita a Yucatán pueda hacerse un anuncio formal en ese sentido. Es darle un giro ya distinto”.
La importancia de la planta Sisal Tejidos Yucatán
- Es la primera en su tipo en América Latina que promueve la actividad henequenera, a través de la manufactura y comercialización de productos de esa fibra que se obtiene de esta planta y es distintivo del suelo yucateco.
- Sisal Tejidos Yucatán recibió del Ejecutivo Estatal un financiamiento de 49 millones de pesos destinados a capital, a través del Fondo de Promoción y Fomento a las Empresas de Yucatán (Foprofey).
- La planta se construyó en un terreno de 16.5 hectáreas, lo cual detonará la actividad primaria de la región que se desarrolla en 62 municipios del estado, la gran mayoría de alta marginación, donde hay plantío del denominado oro verde.
- Por su localización en el centro de la región henequenera, Sisal Tejidos Yucatán es clave para detonar la zona, pues se estima que la producción alcance las cuatro mil 500 toneladas de fibra anuales y genere, en su segunda etapa, 500 empleos directos en el sitio y más 15 mil indirectos.
- Existe un promedio de 50 o 60 productores que representan un cultivo de 5 mil hectáreas y se espera que, con la apertura de la fábrica, pronto otros productores que poseen tierras ociosas las reactiven.
