Por José Luis Preciado
El rasgo distintivo de un buen ser humano y líder natural es la generosidad y Doña Evelia Isabel Arce Escamilla de 67 años, es un gran ser humano en toda la extensión de la palabra.
A Doña Evelia le dicen “La profesora”; tiene su rotonda gastronómica en los altos del mercado 20 de Noviembre de Motul. Ella es la parte popular de la rotonda de los personajes ilustres de Motul, así como Felipe Carrillo Puerto y su hermana Elvia Carrillo, “La Monja Roja”.
Es muy popular el refrán que dice: “ir a Motul y no desayunar unos huevos motuleños, es como no haber ido a Motul”, y hay mucho de cierto en ello. Doña Evelia es la mujer que le dio un segundo aire a ese riquísimo platillo, que es la aportación más yucateca a los menús del mundo, un lugar que incluso no tiene la cochinita pibil.
Cuentan que el creador de tal receta, “Huevos motuleños”, fue Don Jorge Farid Siqueff Febles. Según la crónica de Ariel Avilés, allá por 1921, el escritor y Secretario de Educación Pública de México, José Vasconcelos, fue invitado a visitar Motul, y el entonces gobernador Felipe Carrillo Puerto, le encargó a Don Jorge un platillo especial para agasajar a estos personajes, ya que además de Vasconcelos, venían en la comitiva Diego Rivera, Roberto Montenegro, Jaime Torres Bodet, Carlos Pellicer y Pedro Enríquez Ureña.
En aquel entonces, había toda una corriente socialista que iba desde Yucatán al resto del país y Felipe Carrillo Puerto era el personaje central de esta corriente de pensamiento, así que la ocasión se prestaba para mostrar no solo a los huevos motuleños, sino también la llamada sopa socialista, hecha a base de verduras cortadas en juliana a la que se le agregaba remolacha o betabel para darle el tono rojo; a dicha sopa le tocó acompañar los huevos motuleños y aquello fue festejado con dobles raciones. El gobernador Felipe Carrillo Puerto quedó tan satisfecho y complacido, que lo convirtió en su platillo favorito y el mismo los bautizó así: huevos motuleños.
Doña Evelia le da un segundo aire
Un chile habanero en su punto de sazón y cocido dentro de su salsa para darle sabor, es el mismo chile que luego corona a los huevos motuleños, y no se trata de un gracioso adorno pues el habanero contrarresta la acidez del tomate; ésta fue una de las aportaciones de Doña Evelia a tan sabroso platillo, quien lo elabora diligente y respetuosamente hacia los ingredientes desde hace 21 años.
En todas las lenguas
En octubre de 2017, un libro muy conocido en todo el mundo Lonely Planet Food México y su autora Scarlett Lindeman, consigna a los huevos motuleños como uno de los grandes platillos de este país para el mundo. La publicación toma en cuenta las opiniones de los chefs más destacados.
Visitantes VIP
El canciller Marcelo Ebrard, es uno de los asiduos comensales, junto con todos los políticos y ministros de cultura de Cuba, así como lo más variado en personajes de cine, radio y televisión.
Huevos motuleños
La preparación de este platillo lleva un proceso lento para darle una mejor sazón; primero se pica el tomate, la cebolla y el jamón (de preferencia ahumado) y se ponen a cocer, se le añade aceite y sal al gusto, el frijol refrito, todo hecho de manera meticulosa, dándole su tiempo. Al final del cocimiento, se le agregan los chícharos y el chile habanero, se termina de freír y se apaga. El mayor secreto radica en la preparación de la salsa, la crujiente tostada y el frijol refrito.
A Doña Evelia se le puede ver y saludar de 8 de la mañana a 1 de la tarde; le gusta mucho conversar y mostrar sus platillos, destacando que no solo hay huevos motuleños, sino que también sirven otras presentaciones y omelettes, sin faltar el exquisito café de olla y el pan hecho a mano que es de lo más sabroso. Así que recuerde llevar el hambre suficiente para ser saciada.