La industria del catering es responsable de entre 20 % y 50 % del desperdicio de alimentos
Según datos del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la organización británica WRAP, alrededor del 6% de las pérdidas y desperdicios mundiales de alimentos ocurren en América Latina y el Caribe. En México, se desperdician aproximadamente 94 kg de alimentos por persona al año, según un informe elaborado en 2021.
Uno de los principales contribuyentes a este desperdicio alimentario son los servicios de catering, donde se estima que entre el 20% y el 50% de los alimentos repartidos terminan sobrando, de acuerdo a cifras de Equoevento. Además del desperdicio de alimentos en cada evento, también es importante considerar la huella hídrica asociada a la organización y limpieza de estos servicios, desde la preparación de los alimentos hasta la limpieza de los utensilios utilizados para brindar una experiencia de catering de calidad a los comensales.
Con el objetivo de generar un impacto positivo en el medioambiente y alinearse con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, AMATI box se ha propuesto transformar la industria del catering mediante acciones sustentables y responsables.
La empresa es plenamente consciente del impacto ambiental de sus actividades. Según datos de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), el desperdicio de alimentos contribuye al cambio climático, siendo responsable de aproximadamente el 8% de las emisiones de gases de efecto invernadero. Con base en esta información, AMATI box ha adoptado la definición de evento sustentable del PNUMA (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente), que busca minimizar los posibles impactos negativos en el entorno y dejar un legado positivo para la comunidad anfitriona y todos los involucrados.
Sebastien Roucher, CEO de AMATI box, enfatiza el compromiso de la empresa con la elaboración y distribución de alimentos de manera sostenible, integrando este enfoque en cada etapa del proceso.
Con el fin de poner en práctica estos principios, la empresa de origen mexicano ha adoptado el concepto de «Zero Waste» basado en los siete principios R: reducir, reutilizar, reparar, reubicar, reciclar, reincorporar y rechazar. AMATI box se ha propuesto construir un programa para recuperar sus cajas y botellas, garantizando así la sostenibilidad de sus productos.
Los envases utilizados por la compañía son recuperados por Ecoce, y al ser biodegradables, tienen una vida útil de seis meses, lo que facilita su degradación en el entorno natural. Además, la implementación de cajas individuales tiene como objetivo reducir en un 80% el desperdicio de alimentos, al tiempo que se promueven acciones de comercio justo. Estas medidas fomentan una economía circular que beneficia tanto a la marca como al medioambiente.
En línea con la información que revela que el 40 por ciento del desperdicio de alimentos ocurre en empresas relacionadas con la hospitalidad, y considerando que el desperdicio de alimentos representa hasta el 21 por ciento del consumo de agua dulce a nivel global, AMATI box ha creado una serie de recomendaciones para que las empresas adopten prácticas más sostenibles:
- Optar por productos locales y frescos que no requieran excesivo embalaje.
- Implementar la clasificación de residuos para facilitar su posterior reciclaje.
- Utilizar envases que sean reciclables o formen parte de un ciclo de reciclaje.
- Evitar el desperdicio de alimentos mediante una planificación adecuada de las cantidades a distribuir, teniendo en cuenta posibles cambios en el número de personas a atender.
- En caso de que sobren alimentos, compartirlos con personas en situación de vulnerabilidad o donarlos a organizaciones que los puedan distribuir entre aquellos que lo necesiten.
- Buscar proveedores comprometidos y empresas que sean respetuosas con el medioambiente.
Estas medidas buscan fomentar la adopción de prácticas más responsables y sustentables en el ámbito corporativo.
Con información de Agro 2000