Delfín Quesada Domínguez, secretario Estatal de Desarrollo Pesquero, reportó que el sector pesquero local produjo 450 toneladas de langosta en la temporada que se inició el pasado 1 de julio y concluyó la víspera.
Ese nivel de captura del crustáceo generó una derrama económica de más de 200 millones de pesos en beneficio de unos dos mil 300 pescadores que participaron en esa pesquería. Señaló que el precio en tierra fue de 180 pesos el kilogramo de langosta, y la tonelada de exportación superó en algunas etapas de la temporada los tres mil dólares.
Quesada Domínguez explicó que la especie se captura en aguas de San Felipe, El Cuyo, Tizimín, Río Lagartos y su comisaria de las Coloradas, así como en Dzilam de Bravo y dependen de la actividad más de dos mil 300 pescadores. Apuntó que la langosta es un recurso que tiene que estar en veda por algunos meses, para que su biomasa mantenga buenos niveles, ya que cientos de familias dependen de su captura.
Refirió que este año la Comisión Nacional de Pesca y Acuacultura (Conapesca) aún no define una fecha para la captura de pepino de mar porque considera que “la especie ha sido depredada todo 2014″. “Pero estaremos pendientes de cualquier anuncio de captura de pepino, del cual hubo dos permisos en 2014.
