Indican que no hay consenso entre los presuntos vendedores, ya que quieren conocer la oferta para tomar una decisión.
Por Israel Cárdenas
Una estación del tren maya se construirá cerca de la zona arqueológica.
MÉRIDA, Yucatán.- Por segunda ocasión en menos de una semana, el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) presentó a los ejidatarios de Pisté, municipio de Tinum, el proyecto del tren maya, con el objetivo de comprarles 8.6 hectáreas de terreno para construir la terminal ferroviaria de Chichén Itzá.
La semana pasada la dependencia federal convocó a una reunión, a través de la Procuraduría Agraria, a los 600 ejidatarios que integran el padrón de Pisté, pero no se realizó por falta de quorum, toda vez que el comisario Evelio Mis Tun y un grupo manifestaron su desacuerdo.
Ayer, al cierre de esta edición, Roger Pardío Villamil, asesor jurídico de un grupo de ejidatarios, declaró: “estamos de acuerdo con la construcción de la estación del tren maya, pero hay que saber cuánto van a pagar por las 8.6 hectáreas, es lo que más preocupa a los ejidatarios”.
Agregó que hasta ayer no habían tenido ninguna reunión previa con Fonatur (dependencia encargada del proyecto federal) ni con la Procuraduría Agraria.
Recordó que “el máximo órgano de decisión del ejido de Pisté es la Asamblea, y hoy (por ayer), por primera vez se iba a presentar el proyecto y la cantidad que les ofrecían pagar por sus tierras”.
Roger Pardío afirmó que hay personas de la iniciativa privada y particulares que se han acercado a los ejidatarios para ofrecerles comprar sus tierras, pero no se ha llegado a ningún acuerdo porque el grupo mayoritario no tiene el control de la directiva del comisariado ejidal.
El abogado dijo que la situación que prevalece en Pisté no se ha registrado en otra zona de esta entidad, donde Fonatur ha adquirido tierras para desarrollar sus proyectos.
División
“En Pisté hay muchos problemas con el comisario Evelio Mis Tun, ya que ha realizado diversas acciones de manera unilateral porque no ha llevado a cabo las asambleas para dar cuenta a los ejidatarios de la construcción, entre otras cosas, de una palapa y de un estacionamiento cercanos a la entrada de la zona arqueológica de Chichén Itzá”, aseveró el abogado.
Y señaló que esa situación ha generado que se le impongan multas al ejido por parte de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), por no tener los permisos”.
.-Con información de Novedades Yucatán