En los últimos cinco años, la producción se incrementó poco más de las 16 mil toneladas, al pasar de 40 mil 169 a más de 66 mil durante el 2021.
VILLAHERMOSA, Tabasco. Tabasco, la entidad sureña que cuenta con 24 mil 578 kilómetros cuadrados de extensión, posee el 70% de las reservas de agua dulce de todo México. No hay otro estado que se le iguale. No obstante, la producción pesquera no ha repuntado como se quisiera.
En los últimos cinco años, la producción pesquera se incrementó poco más de las 16 mil toneladas, al pasar de 40 mil 169 a más de 66 mil durante el 2021.
Las cifras en mención permitieron que su participación porcentual en la producción nacional fuera del 3.25 por ciento y su aportación al PIB nacional estuviera en el orden del 4.37 por ciento.
Dentro de sus principales especies producidas destaca el ostión con el índice más alto, al acumular 50 mil 334 toneladas, seguido de la mojarra con 4 mil 79; en tercera posición la bandera, con poco más de 3 mil toneladas y el jurel, 3 mil 292, entre otras especies, que juntas, suman 20 mil 343 toneladas, con un valor de casi 700 millones de pesos.
Se considera que el actual será un buen año, toda vez que la Asamblea General de las Naciones Unidas ha declarado el 2022, como el Año Internacional de la Pesca y la Acuicultura. La iniciativa es de singular importancia, ya que busca centrar la atención y reconocer la labor de millones de pescadores, acuicultores y trabajadores de la pesca, y su contribución al suministro de alimentos saludables para millones de personas en el mundo.
La celebración ofrecerá también la oportunidad de aumentar la información y los datos, en lo que corresponde a su aportación en la seguridad alimentaria, la nutrición, la erradicación de la pobreza y el uso sostenible de los recursos naturales, pero sobre todo, en la confección de políticas públicas y acciones que sirvan de apoyo y fortalezcan su actividad.
Aunque no existe una definición universal sobre el tipo de pesca o acuicultura que cuente como “artesanal” o “en pequeña escala”, es común que se utilicen estos términos para describir la pesca y la acuicultura que utilizan unidades de producción relativamente pequeñas, con pocos insumos y producción, y niveles bajos de tecnología o inversión de capital.
En el mundo, existen alrededor de 59.51 millones de personas que trabajaban en el sector primario de la pesca y la acuicultura. Cerca de 20.53 millones de personas estaban empleadas en la acuicultura y 38.98 millones en la pesca.
De todos aquellos que se dedican a la pesca y la cría de peces, la mayoría se encuentra en los países en desarrollo, y la mayoría son pescadores artesanales en pequeña escala y trabajadores de la acuicultura (90 por ciento, según el Banco Mundial).
A pesar de su contribución, muchos de ellos viven con un alto nivel de pobreza y de vulnerabilidad. Si a esto le sumamos, las condiciones de empleo para los miles de trabajadores, estas suelen ser precarias y en algunas ocasiones se acercan al espectro del trabajo forzoso y la esclavitud.
En términos generales, el mayor número de pescadores y acuicultores se encuentra en Asia (con 85 por ciento del total mundial), seguido de África (con 9 por ciento), el Continente Americano (con 4 por ciento) y Europa y Oceanía (con 1por ciento cada uno).
En términos de género, se estima que a nivel mundial, la proporción de mujeres en la fuerza de trabajo total de la acuicultura es mayor (con 19 por ciento) que en la pesca (con 12 por ciento). Aun así, la disponibilidad de tecnologías, capital y financiamiento sigue siendo limitada para ellas, en comparación con los hombres.
Numérica
- 70% del agua dulce nacional la tiene el estado
- 50 mil 334 toneladas de ostión
- 4 mil toneladas de mojarra
- 3 mil toneladas de pez bandera
- 20 mil 343 toneladas entre todas las especies
- 700 mdp el valor de la producción
Fuente: Novedades de Tabasco