Progreso, Yucatán.- Debido a la mala captura del pepino del mar, la mayoría de los hombres del mar dedicados a esta pesquería decidieron abandonar la actividad, señaló el pescador Manuel Pech Bernal.
Quien dijo que hasta el momento los resultados no han sido los esperados debido a que el pepino de mar está escaso en la zona que abarca desde Dzilam de Bravo hasta los puertos del Oriente.
Culpó de la falta de pepino a las autoridades que dejaron que se capturara de manera furtiva durante todo el año, por ello, afirmó, los pescadores se ven obligados a laborar a mayores profundidades, lo que ocasiona que los buzos corran más riesgos de sufrir una descompresión.
Comentó que más de 300 pescadores de Celestún decidieron poner fin de manera anticipada a la temporada de captura de pepino de mar, porque consideran que son mayores los riesgos que corren que los beneficios que obtienen.
Dijo que frente a las costas de Celestún “el pepino está muy lejos”, cientos de pescadores de ese puerto del poniente se fueron en 300 lanchas a Dzilam de Bravo a laborar cuando se abrió la temporada el 30 de mayo pasado, pero sin buena fortuna. Agregó que esta temporada de pepino está “malísima, ya que las lanchas sólo obtenían de 40 a 50 kilos” y el precio más alto que nos pagaron fue de 60 pesos el kilo. La “pepineada” ya se acabó, no hay pepino de mar y los buzos se descompresionan y mueren, manifestó que mejor suspenden la pesca y se regresan a Celestún para dedicarse a la captura de canané y otras especies de escama”.