TIZIMÍN.— A raíz de las recientes publicaciones sobre la mortandad de abejas que causan las fumigaciones áreas con plaguicidas, reviven un sonado caso de 2018, cuando apicultores sufrieron graves pérdidas cerca de la comisaría de Dzonot Carretero.
Últimamente ha resurgido la preocupación de productores del oriente tras los recientes daños que registraron las unidades de producción por las prácticas que líderes apícolas, agricultores y exportadores han considerado como “criminales”.
Incluso ya hay denuncias penales que se han presentado con las respectivas pruebas y evidencias.
El tema comienza a despertar al grupo de apicultores que en agosto de 2018 denunciaron las pérdidas registradas en sus apiarios a raíz que empresarios influyentes emplearon las fumigaciones áreas en una de las agroindustrias cerca de Dzonot Carretero.
En ese momento los afectados hicieron públicos los daños que registraron sus plantíos de sandía y calabaza, así como a las colmenas de abejas.
Hoy que se ventilan nuevas afectaciones, surgen apicultores como José Nahuat Chan quien fue uno de los varios afectados que registraron pérdidas en sus apiarios.
En su caso dice que le mataron 80 colonias de abejas las cuales nunca le devolvieron.
Sin embargo dice que esas personas no son nada respecto a sus compañeros vecinos de Dzonot Carretero, a quienes les envenenaron 150 colonias.
Dice que pese a que los responsables lo negaron se obtuvieron evidencias y se hicieron las respectivas denuncias, pero nunca procedió.
Asegura que los daños en su caso superan los 200 mil pesos pues cada colonia estaba valuada con un valor de $2,850.
Dice que hoy se vuelve a dar la situación y lo peor que se está deforestando la zona por gente que está llegando a comprar ranchos en Tizimín.— Diario de Yucatán