#DesdeElGrulloJalisco
Todo comenzó en El Grullo. En esta ciudad del sur de Jalisco, la familia García de la mano de Don José, abrían camino en la elaboración de esta rica bebida oriunda de esta tierra.
El tejuino o tesgüino (del náhuatl tecuin: “latir el corazón”) es una bebida fermentada de maíz que consumen diversos grupos étnicos del estado desde tiempos inmemoriales y, hoy, se ha convertido en un próspero negocio familiar, que conserva esa frescura y calidad heredada. Con orgullo se envasa como “El Tejuino: la Herencia de Don José”; precisamente, Don José García es a quien buscamos siempre una vez que llegamos al Grullo.
Procesos tradicionales y de antaño
El proceso de elaboración de la bebida varía de acuerdo a algunas regiones de Jalisco, aunque generalmente se hace con granos de maíz germinados en la oscuridad, que son molidos en metate y cocidos en suficiente agua durante varias horas hasta obtener un atole amarillento que, una vez frío, se cuela. El líquido recuperado se vacía en ollas tesgüineras, se le adiciona el catalizador o fortificador, y se deja fermentar de 1 a 10 días (incluso hasta más).
Es importante señalar que las ollas tesgüineras nunca se lavan por lo que, adherido a sus paredes, presenta residuos de fermentaciones previas. El tejuino no se filtra ni se pasteuriza, así que contiene microorganismos vivos que producen la fermentación, las sustancias metabolizadas que vienen de ellos y los residuos de los vegetales utilizados.
Regularmente se bebe con limón, sal y chile piquín al gusto, aunque podrías no agregarle nada; es de sabor agridulce y contiene bajo grado de alcohol. Los vendedores ambulantes lo ofrecen en los pueblos y ciudades de la región, así como en carretas ambulantes, por lo tanto, es muy poco común encontrarlo en heladerías o neverías.
Tres generaciones enteras de tejuineros
La familia García es bien conocida por sus más de 60 años de tejuineros en El Grullo. Actualmente, la tercera generación es la que se dedica a la elaboración tradicional y venta del tejuino: bebida hecha a base de masa y piloncillo.
Unas palabras de la Familia García:
“Comencé con la venta de tejuino en El Grullo debido a que mucha gente nos decía que nos animáramos a venderlo. Conforme fue pasando el tiempo y estaba estudiando, formé el proyecto como segunda opción, en caso de no encontrar un trabajo saliendo de la universidad, pero todo quedó como un proyecto”
“Después comencé a trabajar como ingeniero en Melchor Ocampo y les platiqué que mi familia vendía tejuino; fue ahí que comenzó el negocio”
“Ya pasó casi un año desde que iniciamos con la venta de tejuino embotellado en bulingas de 1 litro y 5 litros, etiquetadas y selladas”
“Nos han contratado en bodas, XV años, fiestas infantiles y hemos entregado tejuino preparado para cualquier tipo de fiesta”
“El tejuino es un producto natural y sin conservadores, muy delicioso para cualquier época del año porque es un atole; lo puede tomar desde el más pequeño hasta el más grande”
