Por un mar que dure
Especial Rural MX
El mar es sustento, identidad y futuro para muchas comunidades yucatecas. Conscientes de ello, autoridades, pescadores, científicos y representantes de la sociedad civil se reunieron en la Primera Sesión Ordinaria del Consejo Estatal de Pesca y Acuacultura Sustentables, encabezada por la Secretaría de Pesca y Acuacultura Sustentables (SEPASY). El objetivo es claro: trabajar juntos por un sector pesquero más responsable, seguro y sostenible.
La sesión fue el punto de partida para fortalecer la coordinación entre quienes viven del mar y quienes diseñan políticas públicas. En palabras de la titular de la SEPASY, Lila Frías Castillo, se trata de consolidar prácticas responsables que aseguren la conservación de los recursos marinos y una mejor calidad de vida para los pescadores y acuicultores.
Uno de los programas clave es Seguridad en el Mar, que busca mejorar las condiciones en que se realiza la actividad pesquera y, para ello, se otorgarán apoyos en especie como chalecos salvavidas, radios con GPS, bengalas y kits de seguridad, además de capacitación para su uso. La meta es reducir riesgos en altamar y salvar vidas.
Pero la seguridad no es el único tema sobre la mesa. En la sesión también se abordaron estrategias para repoblar especies como el mero, mediante acciones de monitoreo científico y reproducción controlada. El Consejo, que funcionará de forma permanente, servirá como espacio de consulta donde todos los actores del sector puedan proponer y colaborar.
Seguridad, ciencia y sostenibilidad
Otro punto relevante fue el fortalecimiento de la inspección y vigilancia para combatir la pesca ilegal y asegurar el cumplimiento de vedas. Para ello, se están impulsando mecanismos que garanticen la trazabilidad de los productos pesqueros: saber de dónde vienen y cómo fueron capturados.
La maricultura y la acuacultura también tomaron protagonismo. Estas prácticas que permiten cultivar especies en ambientes controlados son vistas como alternativas sostenibles para diversificar la producción, reducir presión sobre las especies silvestres y generar nuevas oportunidades económicas para las comunidades costeras.
Durante la sesión, el Comisionado Nacional de Acuacultura y Pesca, Alejandro Flores Nava, presentó el proyecto estadístico de cierre de las pesquerías en Yucatán para 2024. Por su parte, el Instituto Mexicano de Investigación en Pesca y Acuacultura Sustentables (IMIPAS) compartió investigaciones en curso que buscan aportar bases científicas para la toma de decisiones en el sector.
Compromiso con el mar
El encuentro reunió a una amplia representación de la vida pesquera yucateca: desde autoridades estatales y federales, hasta líderes cooperativistas, presidentes municipales, investigadores y pescadores del oriente, poniente y centro del estado. La pluralidad de voces marca una pauta importante: los retos del sector no se resuelven solos, sino con diálogo y colaboración.
La próxima sesión del Consejo se llevará a cabo en julio, justo antes del arranque de la temporada de captura del pulpo, una de las más importantes para Yucatán. Se espera que para entonces se cuente ya con avances significativos en los acuerdos tomados.
Este esfuerzo por transitar hacia una pesca y acuacultura verdaderamente sustentables no es menor, pues en un contexto global de sobreexplotación, cambio climático y presión sobre los ecosistemas, resulta urgente actuar con visión y responsabilidad.
Yucatán, al menos, ya dio el primer paso.
